La criopreservación de embriones es el nombre técnico que se le da a la congelación de estos durante el procedimiento de reproducción asistida. Estas técnicas desarrolladas primariamente por grupos australianos fueron descritas para poder dar oportunidad a embriones que nos son transferidos al útero de ser congelados y guardados para ciclos subsecuentes.

En caso de que en un primer ciclo la paciente no haya logrado su embarazo y tener la oportunidad de tener embriones congelados para que sin necesidad de pasar nuevamente por todo el proceso de fertilización In Vitro y estimulación de sus ovarios tenga embriones para que puedan ser transferidos al útero materno que haya sido previamente preparado con estrógenos y progesterona.

Esta procedimiento se hace con unos sistemas de congelación que están programados de tal forma que el embrión se va enfriando progresivamente a una velocidad determinada por temperaturas bajo cero hasta aproximadamente -40 grados bajo cero y posterior a este enfriamiento lento y progresivo, se hace un enfriamiento rápido del embrión hasta -190 grados Celsius al ser sumergidos en nitrógeno líquido que provee estas temperaturas bajo cero para bloquear completamente la actividad metabólica celular.

Los embriones para ser sometidos a esta disminución drástrica de su temperatura a puntos de congelación necesitan ser protegidos con unas sustancias que se llaman crio protectoras que hacen que esta congelación no dañe las estructuras celulares del embrión con la formación de cristales dentro de la célula que puedan eventualmente dañar los organelos celulares. Estos crioprotectores son de diferente índole de acuerdo al protocolo utilizado para proteger los embriones.

Los embriones así congelados a -190 grados Celsius, pueden durar en esta temperatura, siempre que esta se mantenga en forma constante, un tiempo indefinido. Cuando vayan a ser utilizados los embriones pueden ser descongelados lentamente hasta tenerlos en temperatura ambiente, una vez se descongelan son evaluados por el equipo de biólogos en el laboratorio con criterios muy rigurosos y muy estrictos de microscopia, evaluando la tolerancia de ese embrión al proceso de congelación y descongelación. Normalmente congelamos embriones en estadios de clivaje.

Embriones que van entre 4 y 8 células de su desarrollo o en estadio de blastocisto al quinto o sexto día